Negocios: Cómo invertir en gente talentosa sin perder el control
¿Cuántas veces hemos visto gente con un talento enorme que sin embargo termina en la ruina o con un mal pasar económico por cuenta de su mala cabeza en asuntos financieros? Muchos y en diferentes ámbitos. La gente más talentosa es quizás la que peor le va con este asunto. Muchas personas talentosas que rayan en la genialidad son poco prácticas manejando los asuntos de dinero.
Entre las posibles razones para que esto sea así creo que la falta de orden y control, es la principal causa del fracaso. Para manejar bien este tipo de asuntos se requiere que la persona sea ordenada y pueda tener control sobre la manera como gasta el dinero.
Desde músicos, pintores, diseñadores de todo tipo hasta nerds de la tecnología de punta, usted se encontrará con gente con un talento enorme en su campo de actuación a la que sin embargo le cuesta transformar esa competencia en un negocio rentable.
Todo este tema me ha venido a la mente porque decidí convertirme en inversor y estoy apostando a una persona talentosa para que saque adelante un negocio.
Mis experiencias dan para escribir otro blog, pues si de aprender se trata lo mejor es hacer. De hecho creo que no existe un manual para inversores tipo ángel.
Simplemente colocamos dinero con una serie de riesgos, muchas veces con pocas expectativas de recuperarlo, no porque lo que la persona hace no tiene posibilidad de comercializarse, no.
Sino que usted debe lidiar con egos desatados, personas sin un método de trabajo claro y en especial con la poca practicidad que tienen para manejar el dinero.
Lo que me ha quedado en claro en este proceso es que usted debe invertir una cantidad que no le quite el sueño si la pierde, algo así como el 1% de su capital neto.
De esta manera si las cosas no salen como usted las imaginó, por lo menos usted no se amargará la vida por eso.
Debe armarse de paciencia para poner orden en el caos creativo de su protegido pues de lo contrario las cosas se pueden salir de control y usted simplemente apostó y perdió.
Por otro lado si las cosas comienzan a resultar, es muy probable que su inversión tenga retornos más que interesantes.
Son muchos, pero muchos los nerds que comenzaron sus negocios así.
Imagino que los inversionistas primigenios, quizás no entendían mucho que iba el asunto del talentoso, pero decidieron embarcarse en la aventura de financiar a gente que muchas veces están en las antípodas de su entorno social inmediato y al final les fue muy bien.
Ese asunto siempre me interesó cuando leo la historia de muchos de los gurús tecnológicos de nuestro tiempo.
Por ahora me interesa saber como han hecho para que este tipo de cosas no les quite el sueño y como han dejado claro de manera legal como debería ser las obligaciones y derechos de los que están apoyando al talento para hacer realidad lo que desean.
Veamos como nos va. Estoy expectante y emocionado con el asunto, los mantendré informados. Saludos.
Autor: Alí Manrique Ingeniero con especialización en Gerencia de Proyectos (PMI). Apasionado de los temas de Gerencia y Finanzas Personales. Del leer, nace el saber. |
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